---- -------

martes, 13 de octubre de 2009

CUANDO NUESTRO CUERPO HABLA...


A esta altura de nuestro recorrido, deseo profundamente que puedan abrirse intensamente y escucharme con sus corazones, porque la mente,- tienen que saber queridos lectores, ya perdió la batalla! Y qué bueno que así sea!
Quiere decir que lo que en esta época tenemos que aprender, no pasa por el intelecto. Éste más bien constituye un obstáculo para acceder a las informaciones que van a nutrir nuestro espíritu.


Para comenzar , quisiera regalarles una hermosa bendición celta, para que los acompañe en vuestro viaje como vehículos de Luz.
Aquí va:
Que la luz de tu alma te guíe.
Que la luz de tu alma bendiga tu trabajo con el amor secreto y el calor de tu corazón.
Que veas en lo que haces la belleza de tu alma.
Que la santidad de tu trabajo lleve salud, luz y renovación a los que trabajan contigo y a los que ven y reciben tu trabajo.
Que el trabajo nunca te canse.
Que libere en ti manantiales de renovación, inspiración y animación.
Que estés presente en lo que haces.
Que nunca te pierdas en ausencias insulsas.
Que el día nunca te pese.
Que el alba te encuentre despierto y atento, esperando el nuevo día con sueños, posibilidades y promesas.
Que la noche te encuentre en estado de gracia y realizado.
Que comiences la noche bendecido, abrigado y protegido.
Que tu alma te serene, consuele y renueve.


Me gustaría retomar algunas ideas sobre la salud de nuestros tres cuerpos, espiritual, mental y físico y algunos mecanismos que utilizamos tan automáticamente, y que son tóxicos y limitantes para nuestra vida.

La idea es aprender a identificarlos y modificarlos, para ir recuperando nuestro bienestar.
Por ejemplo, pensemos en una cualidad propia que nos disgusta. La tendencia es a excluirla y de esta forma, utilizando una forma muy arcaica, el pensamiento mágico - que es una modalidad psíquica infantil-, la tapamos y de esta manera " decretamos” que ya no existe , la negamos.
De manera momentánea resuelvo el conflicto, pero con un costo muy alto, ya que en el momento en que lo estoy haciendo, estaré fragmentando una parte de mi todo.
Piensan que ese mecanismo puede ser edificante para mi ser?
Lo que considero que disgusta dentro de la cultura en la que vivo o también para mi mismo, tiendo a negarlo y colocarlo dentro de algo así como si fuera ” el desván ”de mi propio interior, constituyendo lo que se llama la sombra.
Todo lo que no quiero ver, irá a esa trastienda. Pero no por ello dejará de existir, solo estará en otro lugar. Es como cuando queremos deshacernos de cosas viejas que están en nuestra casa y las llevamos al sótano, donde quedan depositadas y parecen ya no existir. Solo parecen.
La parte negada que constituye ahora mi sombra, sigue simplemente existiendo.
Ahora bien, la tendencia natural de aquello que ha sido excluido y negado es simplemente existir, por eso INSISTE para volver a integrarse al todo.
Es como sucede por ejemplo con el agua, quien a pesar de detenerse ante una piedra, de todas maneras, tarde o temprano, logrará hacerse paso por algún resquicio y mansamente proseguirá su curso.
La otra parte de la personalidad que es la aceptada, intentará que su sombra no vuelva a hacerse visible. Imaginen el resultado? EL CONFLICTO.
Entonces, a través de dos mecanismos, es que lo excluído luchará por hacerse a la luz nuevamente: con la proyección y la somatización.

El mecanismo de la proyección es muy conocido y utilizado por todos nosotros. Cómo funciona? Pongo en el exterior, aquello que no quiero ver en mi mismo. Así reencuentro en por ejemplo una persona, aquello que más detesto como cualidad en mí.
Siempre se trata de algo que es mío, aunque parezca estar a años luz alejado de mi propia personalidad. El otro actúa como un espejo que me refleja esa característica.
De esta forma, inconcientemente generaré circunstancias en mi vida que me muestren claramente lo que no quiero ver de mí.

El ejemplo más común es la crítica hacia una persona. Critico en el otro lo que más profundamente niego en mi propio ser, pero que en el fondo tiene que ver conmigo, por más alejado que me parezca.
Pensemos en algo bien simple: todo sin excepción de lo que llega a mi vida, me lo envían para que aprenda algo y lo cambie en el contexto de un aprendizaje que siempre me permitirá crecer.
Puedo mirar para el costado, si claro que puedo, soy libre para elegir, pero en ese instante tengo que saber que pierdo una excelente oportunidad de avance. El único que pierde soy yo mismo.
La pregunta clave en el caso de la proyección es: esa cualidad que tanto me disgusta y que veo en el afuera, en que lugar de mi ser se encuentra? Negada pero existente al fin.

El espejo me muestra algo. No perdamos la maravillosa oportunidad para vernos reflejados e intentar trasformarnos.
Qué puede haber más motivador que el trabajo para mejorar mi propia esencia?
Entonces, cuando logro reconocer ese aspecto que me irrita, simplemente como propio, es totalmente seguro que ya no me molestará cuando lo vea en otra persona.

Voy dejando de criticar y juzgar a los demás y con ello mi vida se torna más clara y liviana, abierta a nuevas perspectivas, porque mi imán atrae otras realidades, otros vínculos.


Qué maravilloso y placentero es ese camino hacia la salud. Es posible y depende de mi decisión.

El segundo mecanismo , es aquel por el cual el aspecto negado, en lugar de enviarse hacia fuera, se incorpora en mi cuerpo, materializándose así alguna enfermedad o disfunción. Es el mecanismo de la somatización.

El cuerpo hará un síntoma allí donde no circuló la palabra plena, que es la que reconoce una cualidad como propia.
Cuando me hago cargo, es improbable que este movimiento se produzca. No hay terreno fértil. Cuando responsablemente me hago cargo y me esfuerzo en cambiar, voy camino hacia la salud.


Este campo es infinitamente amplio y fascinante, aquí aparece el lenguaje del cuerpo, donde cada síntoma está expresando el conflicto en un área determinada.

Para darles solo un ejemplo, una persona mentalmente rígida pero que lo niega, seguramente tendrá grandes posibilidades de padecer de artrosis o artritis, ya que en este escenario se estará escenificando la falta de flexibilidad de esa personalidad.
Este tema es tan rico y amplio que seguramente podrá llevarnos a compartirlo en otros encuentros, para poder beneficiarnos de la riqueza de la información contenida en diversos procesos corporales y mentales.

Ahora bien , tenemos que acordar en coincidir en algo fundamental, que es la llave de acceso a la solución de todo.
Y es que en la medida que un ser humano se va purificando, la propia elevación de su alma estará actuando como reaseguro para su salud, siendo improbable que utilice mecanismos primitivos y oscuros para desarrollarse en su medio.
Si comienzo a vivir inmerso en códigos de Luz, desestimo toda otra posibilidad , pues será mi espíritu el que guíe el proceso y en consecuencia mi mente, emociones y cuerpo simplemente serán un reflejo de él.

Es imperativo buscar incansablemente las herramientas para que el espíritu pueda limpiarse. No será con la mente que los encontraré, sino abriendo intensamente mi corazón y mi alma.
Cuando el deseo es ardiente, llegan las respuestas.
Toca y se te abrirá, pide y se te concederá…. Siempre es así de maravillosa la verdad...

Mi deseo sincero de que la búsqueda de la Luz y la Verdad, guíen tu vida.

Muchas gracias por estar del otro lado, haciendo tu parte.



No hay comentarios:

Publicar un comentario